- ¡¡Hostias!! ¡qué complicado es ser padre! ¿y ahora qué hacemos, Eva?
-Ni puta idea. Pero me parece que la niña se ha enamorado de Robin Bank.
-Contra el amor no se puede, hija. Eso sí que no tiene remedio. Claro que con el padre que ha tenido hasta ahora la pobre criatura, no es de extrañar que necesite un hombre en condiciones, un héroe, ya me entiendes, una figura masculina con un par de cojones.
-Me parece, Paul, que le estamos dando demasiada libertad. Lo mejor sería matricularla en la pública y que tenga compañeras normales, como ella.
-Angustias no es normal y tú lo sabes. Como me llamo Eva Sión que la niña necesita un psicólogo. Además, tú eres el primero que se lo consiente todo. Le has regalado un teléfono móvil, Paul. Y no para de recibir llamadas.
-¿De quién?
-De Robin, que la llama a cobro revertido.
- ¡¡Basta -gritó Sor Prendida-. No podemos impedir esa relación. Si Angustias se ha enamorado de él, tenemos que asumirlo. Además, aquí traigo los documentos falsificados de su partida de nacimiento y de su adopción. A partir de hoy mismo se llama Felicidad.
-¿A quién se lo hemos encargado esta vez?
-A la mejor falsificadora de todas, la de toda la vida, la nuestra, la de confianza?
-Ah? a Franka Mente?
-Sí, a ella. Franka es como de la familia.
-Pero no puede ser que la niña hable con Robin. No podemos perderla de vista.
Angustias-Felicidad bailaba al son de Radio Futura: ?hace falta valor, ven a la escuela de calor..:?. De pronto se escuchó su móvil. Los tres se quedaron helados al escuchar la conversación.
-Robin, te saco de ahí en cuatro días. Mis madres tienen muchas influencias en todas partes, hacen conciertos con una falsa Madonna y se forran en una sola noche. Además, mi nuevo padre Paul Bazo está experimentando con un invento revolucionario, ¿sabes? Se trata de un perfume que huele a dinero y atrae a todos los millonarios. En dos minutos se les saquea sin esfuerzo. Me voy ahora al Santander. Después he quedado con una amiga de mis madres, Franka Mente, que es falsificadora y tiene un amante juez. Ella se ha ocupado de mis papeles, ya me entiendes. A partir de hoy mi nombre es Felicidad. Voy a hablar con Franka de lo nuestro y seguro que se enrolla. No te preocupes, yo estoy bien. Mi padre ni se ha molestado en buscarme. Dicen que se va a operar el defectillo ese que tiene de dicción, lo de las ?eses?, porque le queda fatal, parece que te escupe. Bueno, no me importa. La cosa es , Robin, que soy feliz por primera vez en mi vida, y desde que leí tu periódico se ha desatado en mí una vocación empresarial , sí, como lo oyes. Yo no quiero un bar de copas como mis madres, las pobres, yo quiero ser banquera. Yo quiero tener un banco al que llamaré Banco Jones?
Eva se desmayó. Paul Bazo se secaba el sudor con la corbata. Sor Prendida corrió a la escuela municipal para matricular a Felicidad?