A horas de vencer el plazo para interponer un recurso contra una resolución del Tribunal Supremo, entran al despacho de Gonzalo Boye.
Esta mañana, el abogado de Carles Puigdemont y Toni Comín, Gonzalo Boye, ha denunciado en su cuenta de Twitter una intrusión en su despacho.
El letrado afirma que no van a conseguir intimidarlos y se lo toma con cierto sentido del humor diciendo que “En todo caso, han ensuciado menos que dejándome una cabeza de caballo en la cama”.
Quien haya sido, sea quien sea, porque nadie puede imaginar quién podría ser, que no se ha llevado nada, ni un ordenador, ha reventado el servidor del despacho y los ha dejado sin acceso a internet.
Esto ha sucedido el día en que terminaba el plazo para presentar el recurso contra la sentencia del Tribunal Supremo que mantiene la OEDE (Orden Europea de Detención y Entrega) contra los representados del abogado.
A pesar de los contratiempos que la intrusión ha provocado, Boye afirma que aun así han llegado a tiempo para presentarla, que es algo de lo que informamos así de pasada porque estamos totalmente seguros de que no tiene nada que ver con la intrusión y que ha sido pura casualidad, como no podía ser de otra forma en un estado garantista donde no existe la corrupción y la justicia es ejemplar.